La compañía de Redmond anunció cambio de estrategia con el fin de unificar el ecosistema de Windows. El resultado de este movimiento afectará a 1800 empleados, la mayoría de los cargos que son
12500 pertenecen al personal de la planta de producción de terminales, la mayoría de los recortes de personal en Microsoft, que tiene una fuerza laboral mundial de 118.000 personas, se darán en la división de teléfonos móviles.
La mayor parte de ese ajuste se hizo en diciembre del 2014 y hasta ahora no ha terminado de despachar a todos. Microsoft asumirá pérdidas contables de 7600 millones de dólares por la adquisición de la división de teléfonos inteligentes de Nokia el año pasado y tiene entre sus principales objetivos agilizar la estructura de la compañía, lo que significa dejar de lado los negocios no prioritarios.
Esto se debe a que la empresa está tratando de hacer más grande su negocio de telefonía independiente ya que el pasado no tuvo mucho éxito con la ex compañía de teléfonos móviles cuya compra se cerró en 9500 millones de dólares, y es el reconocimiento de que el segmento de hardware móvil funcionó muy por debajo de las expectativas.
Asegura que en poco tiempo tendrá una gama de celulares más eficaces sin necesidad de perder la capacidad de reinvención a largo plazo en movilidad. El recorte de personal tiene tuvo lugar a las pocas semanas de que se reestructuro la parte alta de sus divisiones. Microsoft apuesta por un sistema operativo unificado, lo que solucionaría en gran parte los problemas que trajo Windows Phone. Lo único que resta es convencer a los desarrolladores importantes de participar con aplicaciones y mantenerlas al mismo nivel de actualización que en iOS y Android. Hasta ahora el futuro de la empresa con los celulares es bastante incierto, se espera hasta septiembre para ver los resultados.